Foster S Hollywood Cuenca — Restaurante in Cuenca

Reseñas de Foster S Hollywood Cuenca

• Samantha

  Adicional 2016.06.06

  Los camareros muy atentos,aunque en días de diario a la hora de comer que hay menú del día y se llena bastante se agobian un poco. La comida muy buena y abundante (es el foster en el que más comida he visto en los platos,lo cual se agradece dado el precio de los mismos). La única pega es que últimamente toooodos los nachos que pedimos vienes un poco (algunos bastante) quemados por la parte de arriba...quiza deberían controlar mejor la temperatura del horno...por lo demás un diez.
• Irene

  Adicional 2015.12.30

  El servicio pésimo al igual que las camareras y su amabilidad....... deja michisimo que desear.... sobre todo si tienes 2 horas para pensar que escribir mientras te sirven o no....
• Emily

  Adicional 2015.12.22

  Pero no, en Hollywood no se apuesta por la calidad.
• Romina

  Adicional 2015.06.29

  Muy variable. Días muy buenos, días regular.
• Paulina

  Adicional 2014.12.20

  Me gusta la comida que ofrecen allí, es algo diferente a lo que puedes conseguir en los restaurantes de comida rápida, es un buen sitio y me gusta la decoración, además hay muy buena atención.
• Amelia

  Adicional 2014.06.25

  Foster’s Hollywood ya no es rescatable. Desde el restaurante genial de hace 30 años en Arapiles a la ausencia total de calidad de hoy en día, media un abismo.
• Alma

  Adicional 2014.02.22

  Las trabajadoras son lo único que se salva. Intentaron hacernos la vida más llevadera y en parte lo consiguieron.
• Fernanda

  Adicional 2013.12.03

  Carnes que merecen la pena olvidarse, pan de baja calidad, todo huele a recorte continuo de costes, lo que lleva a una experiencia nada gratificante.
• Camila

  Adicional 2013.09.08

  En Madrid hay opciones para comerse una buena hamburguesa. En Cuenca, mejor buscar algo del terreno.
• Ashley

  Adicional 2013.07.25

  Eso, en lo general. En esta experiencia concreta tardaron infinito en traernos una hamburguesa, sin entrantes. Llegó fría y con la carne masacrada. Nos ofrecieron cambiarla pero ya no teníamos paciencia.